miércoles, 5 de enero de 2011

Youtube bass player Mistes8

Hola!

am digamos que hoy no estoy muy bien y es debido a la noticia de que mi bajista de youtube favorito Mistes8 quien sus vídeos eran maravillosos covers de Nightmare, Larc en Ciel y Nana Mizuki cerró su cuenta y no podremos ver la mayoría de sus vídeos excepto por unos cuantos que otro usuario ha re-subido.
Es una terrible noticia para mi el abrir uno de los links que tengo en favoritos y que me aparezca la siguiente imagen:


Es algo horrible de aceptar para mi por eso conservo la esperanza de que mistes8 volverá a subir sus vídeos ya sea con otra cuenta o tal vez tenga una pagina propia, tendré que buscar con mas tiempo, también esta la posibilidad de que estén en el "youtube japones" nico nico video

un par de imágenes que alcancé a tomar de los vídeos de mistes8 para ponerlas en mi display de mesengger y facebook sin saber lo que ocurriría después.



Realmente es una terrible noticia para mi, pero como ya dije anteriormente, otro usuario (xp294punk) a re-subido algunos de los vídeos de él, no se cuantos eran exactamente los que Mistes8 había subido a su cuenta (muchísimos) pero nos queda el consuelo de estos cuatro vídeos, los demás no se que paso con ellos no se si el usuario xp294punk los tendrá o se perderán para siempre de youtube.
Estos son los vídeos que xp294punk re-subió, muchas gracias por no dejar que Mistes8 desapareciera por completo dejando unos cuantos vestigios de su talento (;_;)



Oh dios los vídeos que quedan son todos con cosplay *0*







Solo me queda buscar, buscar, esperar y lamentarme por no haber guardado todos sus vídeos (;_;) ahora mismo se me antoja escuchar "My Hearth Draws a Dream - Larc en Ciel bass cover" (;_;) pero por ahora buscaré por si de pronto los vídeos están en una pagina web.

Nos vemos!
(;_;)

miércoles, 1 de diciembre de 2010

cuarto capitulo THE DROP HONEY LOVE

Capitulo 4

La esencia de Ion quedó impregnada su pijama que había sido testigo de la noche anterior, así que esa esencia ya les resultaba familiar.
Pero no era lo mismo con la mano de Dylan, sentir ese tibio fruto del orgasmo que el mismo había provocado era maravilloso.
Sacó la mano del pantalón con la misma suavidad con la que la introdujo y con la otra limpió el sudor perlado que escurría por la frente del menor.

Con la respiración agitada y el corazón golpeándole con violencia el pecho, recostó su tembloroso cuerpo sobre su cama, con los ojos fijos en su hermano, quien caminaba hacia la puerta.

-…- Ion no dijo nada más, ya había pasado su ‘momento glorioso’ y tenía que volver a la realidad. En ese momento no tenía idea de que pensar o que decir respecto su hermano y a el mismo, a duras penas creía que lo que acababa de pasar había sido real.
No sabía qué hacer, le preocupaba su hermano y su relación, estaba a punto de romper a llorar cuando Dylan abrió de golpe la puerta y él se asustó un poco.

-Mejor démonos prisa, vas a llegar tarde, ya te lo he dicho ¿no?- El mayor ahora tenía una actitud muy diferente a la de antes, estaba rejado y con su voz amable tranquilizó un poco a Ion - son pasadas las 11:30 y no has desayunado- retrocedió para acercarse a su hermanito, le acaricio la cabello y luego lo revolcó un poco y sintió un poco la humedad debido al sudor. Tomó impulso, se inclinó y cargo a Ion, caminando rápido lo llevo hasta el baño.

-hum siquiera que nuestra madre no ha visto nada de lo que pasó ¿verdad?- al hacer énfasis en nada Ion de inmediato se volvió a sonrojar – bien te dejo para que te duches, recuerda que solo tienes 10 minutos ¿okay?- le recordó amablemente.

-De acuerdo– Ion por fin dijo algo aunque solo fue un susurro –y…gracias– concluyó tímidamente y con un sonrojo adorable, el mayor se detuvo en el umbral de la puerta

-Sí…- volteo a verlo, él lo miraba con agradecimiento e inocencia y de inmediato Dylan sintió que el corazón se le aceleraba.

–-o-–

En el instituto

-Hola Ion, casi llegas tarde, que raro en ti- su amigo Duk le saludó con una gran sonrisa dándole la bienvenida a otra tarde de clase.

-Sí ajaja por poco me dejan afuera – el pelinegro se reía fingidamente recordando las razones por las cuales casi se queda por fuera.

-No creo, ese vigilante no te cerraría la puerta ni aunque llegaras media hora tarde ¡¿qué no has visto cómo te mira?! Te desea ♥

-Jajaja, lo siento, no pude evitar escuchar la conversación y estoy de acuerdo con Duk –Dice un apuesto joven, mientras descarga su maletín en su pupitre y se recuesta sobre Duk, saca un dulce de su bolsillo, lo desenvuelve y se lo mete en la boca a Duk, haciendo que la lengua entre en contacto con sus suaves y rosadas yemas.

-Hey…mmm ¡que rico!- los ojos del castaño brillaban por el dulce sabor.

-¿conque te parecen ricos mis dedos?- añadió Max con tono malpensado, mirando pícaramente al castaño.

-¡No!- pero el sonrojo en sus mejillas indica lo contrario- estoy hablando del dulce, idiota pervertido.

A Ion solo le queda reírse de la situación – ustedes ya no parecen solo amigos- añade insinuantemente.

-Y dime Duk ¿quieres más?

-¡Sip!-afirma Duk como un cachorro.

-Genial, pero esta vez ¿Dónde quieres que ponga mis dedos?- su pregunta va cargada de doble sentido.

-¡Imbecil! Sabes que estoy hablando de los dulces y además- el reproche del castaño se vio interrumpido por la llegada al salón del intimidantemente sexy profesor de economía.

-¡Silencio!- dice con voz firme el profesor – y no se comen dulces en mi clase- remató lanzando una mirada fiera a Duk.

-Sí señor- “maldita sea siempre quedo mal en esta clase, es como la maldición del profesor de economía o algo así...que horrible”

-Alumno Duk pase al frente por favor- pero más que un favor parecía una amenaza y para rematar el profesor Nate estaba mirando tan fijamente al castaño que lo puso nervioso.

-S... Sí- el chico se levanta de su asiento muy nervioso y camina hacia la pizarra sintiendo la mirada expectante de todos los alumnos, pero lo peor era la de Nate, esa se sentía como un piano en su espalda.

Mientras Duk caminaba hacia el frente, Ion trató de decirle algo en voz baja pero Duk al prestarle atención se tropezó con la pata de un pupitre y cayó en sus rodillas y sobre sus manos para amortiguar, quedando en cuatro patas justo al frente del profesor, con su cara a escasos centímetros de tocar la entrepierna de Nate.
Todos carcajearon y el nerviosismo de Duk se convirtió en trágame tierra. Nate miró hacia abajo y se encontró con el castaño mirándolo con sus mejillas sonrojadas a causa de las burlas, muy cerca de su entrepierna muy cerca de su entrepierna, en esa comprometedora posición y con la mirada de cachorro que lo caracteriza.


-Oh que lindo…-pensó pero de inmediato volvió a la realidad y le dijo – levántate y resuelve el problema número tres de la página veinte del libro de estadística- sin esperar respuesta por parte del menor se giró hacia su escritorio y sentándose elegantemente aun con esa imagen de Duk dando vueltas en su mente y llenando lo de curiosa tentación.


-S…Sí señor…-respondió el otro con una voz obediente lo que indujo al profesor a imaginárselo en el piso, diciendo de una forma sumisa y provocativa ‘si señor’

-No sabes hacerlo ¿no?- pregunta sarcástica.

-La verdad es que no, ¿me podría enseñar?- las palabras de Duk incitaban a su pervertido profesor a querer hacerle decir a su despistado alumno cosas más comprometedoras (xD)

-Siéntate- ordena y Duk obedece inmediatamente- te ensenaré después de tu última clase- con un susurro serio pero con un toque de doble sentido le dice al chico, haciendo que este detenga su caminar abruptamente y comience a pensar en las cosas que podrían pasarle después de clases.

Hapiness has a Wing...


lunes, 1 de noviembre de 2010

Nujabes

Fué un Productor y Dj japones, lanzó dos álbumes en Japón, Metaphorical Music en 2003 y Modal Soul en 2005. También colaboró con su música en la banda sonora de Samurai Champloo con Shing02.

Su nombre real era Jun Seba y digo era porque murió este año en un accidente automovilístico.

Su música con influencias del Beat del Hip-Hop y del cool jazz hacen de sus canciones un sonido especialmente rico en matices e instrumentos creando una atmósfera relajante y natural.

Desde el momento en el que me dieron ganas de crear un blog, lo primero que pensé fue en ambientarlo con esta excelente música hechicera de sentidos.

Disfrútenlo






Y esta canción la escuche hace aprox. 3 años en un capitulo de Samurai Champloo y no sabia ni como se llamaba y la tuve e la mente hasta hace poco que la volví a escuchar, esta vez ya sabiendo que es una obra de Nujabes.



con este ultimo me despido
si a alguien le interesa la disco-grafía completa de él, pongo el link de la descarga en Taringa
clic aqui para entrar al sitio

miércoles, 27 de octubre de 2010

tercer capitulo THE DROP HONEY LOVE

Capítulo 3


“Trágame tierra”, ese era el pensamiento reinante en la mente de Ion.
El denso silencio que se sentía en la habitación fue interrumpido por una frase, más bien una pregunta desesperada por una respuesta que Dylan le lanzó a Ion acompañada de una mirada recelosa.

-¿Con quién soñabas?- lo dijo con una mezcla de reproche, curiosidad, escepticismo y otros sentimientos indescifrables.

-em… yo…pues verás…- Ion hubiera preferido que su hermano saliera de la habitación con la peor impresión sobre el asunto, pero no, su hermano prefirió golpearlo con un mazo lleno de clavos incrustados o al menos así fue como Ion se sintió con la indiscreta pregunta.

-¿Con quién?- Repitió el mayor, esta vez se podía sentir una ligera dosis de amenaza.
-¡Hermano no me hagas ese tipo de preguntas!, solo vete quieres…- Al parecer la golpiza psicológica que Ion recibió hizo reaccionar su cerebro para defenderse con una frase coherente. Pero ahora el problema radica en el rostro de Ion, ya que su notable sonrojo y su mirada extasiada de vergüenza inocente, le harían entender más tarde a su hermano todo lo contrario a lo que su boca decía.
Una expresión delatora que Ion no podía controlar pero era de esperarse ¿no?, después de todo el protagonista de sus fantasías eróticas estaba ahí en frente y buena parte del cuerpo de Ion deseaba que ese protagonista se hiciera cargo de su dolorida erección.

-Hermano…yo…- ahora su voz sonaba más como una explicación, como una súplica pidiendo ser perdonada como una voz dulce hechizando los sentidos de su verdugo.

Y al parecer esas palabras funcionaron perfectamente, porque los pensamientos que afloraban en la mente Dylan como “¿En quién demonios estabas pensando?” o “maldita sea…quien sea que le guste a Ion no se lo dejaré fácil” se detuvieron.
Ahora no tenía espacio para preguntas, teorías, dudas o celos en su cabeza porque todo su ser se vio ahogado en un deseo incontrolable.

-Bien…entonces tendremos que hacerlo un poco rápido, recuerda que estas retrasado para llegar al instituto- dijo Dylan con un tono meloso y juguetón, era como la voz misma del deseo que le invadía todo.

-¿Qué dices?- repuso Ion con voz temblorosa, la pregunta fue de duda total, el pelinegro pensaba que sus sentidos le fallaban. Pero no fue así, Dylan se acercó con una lujuriosa sonrisa cincelada en sus labios y mirándolo fijamente como si quisiera embriagarlo con el deseo que desbordaba de sus ojos.
Ion simplemente no tuvo tiempo de hacer, decir o pensar nada, estaba atrapado en los ojos de su hermano. El mayor se inclinó sobre el menor y con la yema de su dedo índice comenzó a tocar y a hacer círculos sobre el glande de su hermano por encima del pijama.

Ion se quedó de piedra, no podía creer que la fantasía en la que cada noche pensaba estuviera a un suspiro de hacerse realidad.
No pudo rechazar la pasión que su hermano le trasmitía con los ojos con la mirada y con esas suaves y delicadas caricias en esa zona tan sensible.

La expresión de Ion se tornó una mezcla de placer y dolor fingido, con una mirada en llamas y un gemido ahogado.

-Hermano... ¿qué haces?- su voz se escuchó como una súplica cargada de deseo.

-Solo trato de ayudar a mi hermanito con su problema- respondió el mayor llenando el aire de lujuria con su voz, mientras deslizaba su mano dentro del pantalón, deleitándose con el tacto de cada centímetro de piel.

-¡Ah! No me toques ahí, me da…vergüenza- el menor estaba débil, como si esa mano estuviera envenenándolo.

Ignorando lo que decía el pelinegro, Dylan comenzó a masajear con ritmo aquel miembro, empezó muy despacio, como si quisiera que el tiempo también tomara ese ritmo.

-Ahh…mmm esto se siente tan…- con sus mejillas sonrojadas al tope, sus ojos entrecerrados mirando el rostro de su hermano entre lágrimas, pues el deseo comenzaba a desbordarse de sus ojos… y al parecer muy pronto también se desbordaría de su miembro.

-Creo que subiré un poco el ritmo, llegaras tarde…- dijo con un susurro que cosquilleó en las orejas de Ion y digiriéndole una risita cínica.

-No…tan rápido se siente un poco raro… nnm- “mierda ¡se siente tan bien!” pensó.

-¿Se siente un poco raro? jajaja ¿no querrás decir ‘se siente muy bien’?- Dylan estaba alucinando con el rostro de su víctima cada vez que tocaba su punto más sensible pero eso no era todo, sus ojos siempre estaban atentos a todas las y cada una de las reacciones de Ion, eso para el mayor era todo un deleite.

No era suficiente, Dylan necesitaba llegar más lejos.

Desafortunadamente no podía, intentaba suprimir sus deseos acariciando el rostro y el cuello del pelinegro esto producía el efecto contrario y esos labios de durazno le resultaban más irresistibles que nunca.

Redujo el ritmo en la mano que atendía la erección al ver que Ion ya casi no aguantaba más y quiso volver a comenzar, otra vez lento, suave y con cautela mientras con su otra mano palpaba las suaves facciones del rostro de Ion tratando de trasmitirle su delicadeza.

-Hermano…creo que no aguantaré mucho más ahh...oh- el pequeño hacia todo lo posible para soportar más, él sabía que cuando llegara al clímax todo acabaría así que mentalmente le agradeció por bajar el ritmo de las caricias.
Se aferraba a las sabanas con ambas manos, sus caderas se movían al compás del vaivén que dictaba la mano de Dylan dentro de su pantalón.
Desde que su hermano vivía otra vez con ellos, Ion fantaseaba una y otra vez con ese momento, por eso saboreó cada segundo, cada suspiro y cada gemido que le ofrecía a su hermano como si de un manjar se tratase.

-¡mmm!...ahh ah yo…ya casi… ¡Dylan aaah!- el tan deseado e indeseado clímax se hizo presente. La vista s ele torno borrosa, su espalda se arqueó hacia el cuerpo de su hermano con un escalofrió recorriéndole al tiempo que daba el ultimo gemido en voz alta, fruto del éxtasis.

lunes, 25 de octubre de 2010

El paraíso Solitario

Trasmitiendo desde mi otra nueva casa la cual parece un paraíso solitario estoy deseando poder pasar el 31 de octubre con mis amigos pero al mismo tiempo a veces pienso que mejor no.

Esto es lo que me queda para mirar en medio de la tarde.






Y así es el pueblo

domingo, 24 de octubre de 2010

segundo capítulo THE DROP HONEY LOVE

Capítulo 2


Suenan los vehículos, la luna se encuentra en la cumbre del cielo, un joven inexperto de la vida en la soledad de su habitación, se imagina como seria una agitada noche con su hermano mayor, bañado en sudor, da rienda suelta a su imaginación.

- ah…ah! hermano por favor…por favor mas…ahh!

Dice en voz baja, en un susurro que se convierte en una desesperada pero dulce suplica, que se hace casi impersectible gracias a los ruidos citadinos.

-ah…ya casi haa…ya casi me corro, vamos…mmm
-“hoo…te corres tan rápido…tendré que enseñarte a durar un poco más”.

Eso es lo que el joven cubierto por una fina película de sudor piensa que su hermano mayor le diría en tan comprometedora situación.
Un escalofrió recorre su tersa espalda, la visión se le hace borrosa, es el momento del clímax, arquea su columna, su cabeza se mueve con brusquedad hacia atrás, desprendiendo cristalinas gotas de cansancio de su húmedo y enredado cabello plata, un gemido ahogado apenas se hace notar un poco mas allá de su garganta y se derrama exquisita y tibiamente sobre su propios dedos y las sabanas plegadas perfectamente desordenadas.

-Ion, ¡despierta maldita sea!
-mmm…que quieres? – dice con tono de dulce suplica.

Inmediatamente se dibuja en las mejillas del intruso un tono carmesí.

-mmm…con que quieres quedarte en cama? –dice con tono pícaro esbozando una sonrisa cómplice.
-si… por favor déjame…te lo ruego-dice Ion con tono intencionalmente inocente.

El intruso no se hace esperar. Inmediatamente comienza a bajar las cobijas que cubren el cuerpo de hans que se encuentra en posición fetal y unas manos extremadamente pálidas que se escabullen entre la ropa, buscando con ansiedad delicada su objetivo y en el recorrido dejando un suave cosquilleo en la piel del otro.

-mmm…hermano…tus manos están frías-dice Ion mientras se da vuelta para mirar a su hermano con las mejillas ardiéndole.
-si…pero tu cuerpo se siente tan caliente que fácilmente se derretirá, y ahora…-dice Dylan mientras pellizca uno de los pezones de Ion cuando dice “ahora”.

-ah! hermano, si haces eso yo…
-Deja de quejarte y levántate de una vez, no quiero que llegues tarde al instituto, te meterás en problemas.

Una amable voz había sacado a Ion de su profundo sueño carmesí, la mañana estaba amarilla y enérgica.
Al parecer el hermano que aparecía en los sueños de Ion ahí se quedaba, porque el real era mucho más serio y comprensivo que el pícaro y maliciosamente lujurioso que habitaba en su mente.

-Hermano…- su voz estaba adormilada y desalentada
-Deja de hacerte el dormido y de hablar entre sueños, maldición, ¿Qué clase de actuación es esa?- le reprochó el mayor.

-¡Espera!..¿Qué? … ¡¿No me digas que hablé dormido?! – el chico con la cara roja hasta las orejas y un notable nerviosismo.
-Sí, ya deja de hacerlo, aunque parecía más bien que fingías estar dormido- Ion se sonrojó violentamente; no podía creer que su mente y su corazón le traicionaran de aquella forma, entregándolo al enemigo sin defensa. Quería salir corriendo, no soportaba más la mirada expectante de su hermano, sentir esos rasgados ojos plata era vergonzoso.
- Llegaré tarde – Ion iba a levantarse de su cama a toda prisa, cuando notó un duro inconveniente en su entrepierna, así es, el pelinegro estaba en una situación tan embarazosa como sus propias fantasías, su erección amenazaba con sacarlas del oscuro rincón en su mente a la luz que se filtraba entre las cortinas de la habitación.

Suspiró profundo y quedo petrificado.

-¡Hey! no me ignores- Dylan arrancó de un solo jalón la sabana que cubría la parte baja de su hermano y sintió sus mejillas un poco enrojecidas, las palabras no conseguían pasar de su garganta. Se quedó mirando aquella erección con los ojos como platos.

-…- el cerebro de Ion no producía transmisiones a los nervios de sus cuerdas vocales, solo s ele acaloraban más las mejillas y su miembro palpitaba un poco dolorido, aunque ese no era realmente el problema.

Ahí estaba él, afrontando las consecuencias de sus pecaminosas fantasías.